miércoles, 10 de diciembre de 2008

Vivo en mi memoria...

Quiero creer que en cada atardecer,
cruzas mil calles húmedas
rumbo a un bar,
sólo para sentarte a leer.
Quiero creer que caminas
las noches renovadas,
sin urgencias, sin quiebres,
sin renuncias.
Quiero creer que estás vivo,
aún cuando en tu memoria
no haya refugio alguno
para reencontrarte
con un retazo de mi vida.