lunes, 30 de agosto de 2010

un domingo...

Morí mil veces y nací otras tantas
todas llenas de caminos,
elegí un domingo para partirnos en dos,
y desde entonces te busco..
risco sin ladera,
música sin canto...
te busco,
en un cielo que te atrapa,
en un mundo que te oculta,
en una voz que me confunde,
en un silencio que no abraza...
te busco, y esta horfandad
es una llaga abierta,
una tristeza tantas veces proclamada,
una locura tan evidente,
tan frágil la cordura...
me invento rutinas, rutas inacabadas...
te busco sin saber si estás
tan cerca, tan lejos,
tan imposible, tan constante...
entre palabras y lágrimas ,
entre sonrisas tristes,
en noches eternas, en tardes doradas,
y pido a Dios la brújula,
que si no puedo encontrarte
al menos me vista la calma.

Busco...

Busco...en las cuentas perdidas de un rosario,
al jugador oculto,
busco... en las puertas del cielo y del infiierno,
porque no es santo quien nunca navegó
en las termas del error
sino quien escapó de su fragua...
busco en los silencios, en la palabra sobreentendida,
quizás dolida,quizás risueña, mitológica o pagana
quizás sólo fantaseada...

Alma en rehabilitación...

Su alma estaba en terapia intensiva.Había pasado por cirugía mayor, urgente y necesaria.Le extirparon la glándula que le permitía estrellarse contra las utopías.Como sonámbula buscaba día y noche espejos en los cuales mirarse, pero una y otra vez la imagen aparecía borrosa.No es que faltaran palabras amables, ni sonrisas y uno que otro abrazo que sostuviera. Sí se había fugadola pasión que suele dar ritmo a los pasos.Pero la vida es fuerte y la vida llama, a veces con una semilla que estalla, otras con un rayo de sol...La música será nueva, tendrá que aguzar el oído, respirar profundo la liviandad del aire, encontrar la alquimiaaceptar el tiempo de rehabilitación.