miércoles, 20 de octubre de 2010

aquella luna...

La luna borda un sendero
de lágrimas y ruegos,
guarda en su cara escondida
una espera delirante ,
bendita, interminable.
Busca una y mil razones
para no desprenderse del cielo,
transita días en silencio
embelezada en sueños ajenos...
La luna espera
que aún sea cierto
el milagro
de encontrarse con los ojos
del color del tiempo...